La ropa es nuestra segunda piel y más allá de satisfacer nuestras necesidades básicas como protegernos de los cambios climáticos, la ropa expresa nuestras ideas y emociones.
Casi todas las corrientes sociales y culturales se han visto reflejadas en lo que decimos pero también en lo que vestimos.
Antes de que una persona se acerque a otra por la calle lo suficiente como para poder conversar, esta ya está comunicando su sexo, edad, la clase social a la que pertenece y posiblemente está dando información sobre su profesión, estado de ánimo, gustos, personalidad, etc., por medio de lo que lleva puesto.
Por eso es que una prenda de vestir, puede significar más de una cosa al mismo tiempo ya sea por el color forma o accesorios que la acompañan.
Partiendo de la premisa anteriormente mencionada de que la ropa comunica yo pienso que la ropa se puede usar también como medio de ayuda para la autosanación.
En la cromoterapia por ejemplo los colores generan una influencia física, psíquica y emocional de la cual nosotros no somos conscientes en general y que le permite a nuestra energía vital tener un estado que facilita la autosanación.
Cuando uno se hace un cambio de look le damos un nuevo aire a nuestra vida una nueva actitud, conseguimos una renovación espiritual y un aumento del amor propio porque admiramos en nosotras mismas el hecho de habernos atrevido a cambiar nuestro aspecto.
Nos sentimos liberadas a mostrar nuestra propia personalidad.
¿Cómo te hace sentir la ropa que llevas puesta hoy?
